Una (divertida y sincera) carta de Damon Lindelof a los críticos reaviva el eterno debate sobre el binge-watching

Una (divertida y sincera) carta de Damon Lindelof a los críticos reaviva el eterno debate sobre el binge-watching

20 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail
Una (divertida y sincera) carta de Damon Lindelof a los críticos reaviva el eterno debate sobre el binge-watching

Los servicios en streaming han puesto de moda (y han favorecido con su forma de plantear narrativamente las series) el fenómeno del binge-watching o, hablando en plata, ver capítulos uno detrás de otro sin apenas parar entre medias (la traducción literal sería visionado-atracón). Esta práctica genera muchos debates sobre la ficción televisiva y lo que la define, empezando por el sentido que toma lo episódico al formar parte de esta forma de consumo.

Damon Lindelof tiene su punto de vista al respecto, y ha decidido adjuntar una carta dirigida a los críticos televisivos que han recibido casi toda la tercera y última temporada de ‘The Leftovers’ para poder visionarla previo al estreno y publicar reseñas. HBO ha optado por entregar a la prensa especializada siete de los ocho capítulos que se emitirán a partir del 16 de abril (también en HBO España).

A continuación os presentamos nuestra humilde traducción de esa carta firmada por el creador, de la que podéis leer el original en TVLine.

Querida comunidad de críticos,

¡Buen día! Bienvenidos a la tercera y última temporada de The Leftovers. En nombre de todo el equipo sólo quería decir una cosa antes de que os embarquéis en este viaje.
Los atracones son malos.
Soy de la vieja escuela. Y no sólo porque estoy de acuerdo con Joss Whedon [1] en casi todo. Nunca en la historia del idioma Inglés “atracón” ha estado asociado con algo sano o productivo. Sólo porque tienes un bote de Pringles entero frente a ti no quiere decir que deberías comértelo entero de una sentada. Cada vez que he hecho eso me he sentido triste y culpable, y luego molesto con The Pringles Corporation. Que probablemente no exista. Pero a la vez también tengo que darme cuenta de que los tiempos han cambiado. Debo admitir que no sólo es que haya demasiada televisión, sino también que hay demasiada buena televisión (Fleek TV? [2]), y para causar algún tipo de impacto nosotros los que producimos tenemos que abandonar nuestras mecedoras y ponernos en onda. Algo que probablemente incluye no volver a decir “en onda”. En fin…
Os mandamos siete de los ocho episodios. Vedlos como creáis adecuado. Comentadlos como creáis adecuado. No estoy en el lugar de sugerir cómo tenéis que hacer vuestro trabajo. Preferiría que no arruinaseis algunos detalles, pero al final pienso que es ridículo hacer una lista de ese tipo porque podría parecer completamente arbitraria. Lo único que pido es que si hay algo de lo que ocurre en la serie que os sorprende (tanto positiva como negativamente), sería genial mantener la misma sorpresa para la audiencia.
Por ejemplo, cuando Liv Tyler dispara láseres con sus ojos en el capítulo 4, queremos que sea tan sorprendente para ellos como lo será para vosotros.
Liv Tyler no dispara láseres con los ojos en el capítulo 4.
Es en el 6, de hecho.
Pero, ¿no os fastidia que os lo haya dicho?
Lo entendéis, sois profesionales. El tema es que nunca he enviado tantos capítulos por adelantado y me da pavor, así que intento mitigar ese miedo controlando las cosas, pero la forma de controlarlas es tratar de convenceros que no me importa no controlarlas. Además anoche me comí una lata entera de Pringles mientras veía entera la primera temporada de ‘Fleabag’ hasta las 3 de la mañana así que, ya sabéis, hipócrita.
Una última cosa. Por favor, no reveléis el año en el que tiene lugar esta temporada ni el nuevo diseño arquitectónico de STERLING, COOPER, PRYCE, GARVEY & JAMISON.

Vuestro colega,
Damon.

[1] Hace poco Joss Whedon hizo unas declaraciones con respecto al modelo de Netflix. “Yo no querría hacerlo. Querría que la gente volviese semana a semana y tuviese la experiencia de ver algo al mismo tiempo. Nosotros emitimos ‘Doctor Horrible’ en tres actos y lo hicimos en parte porque crecí viendo miniseries como ‘Lonesome Dove’. Me encantaba la televisión evento (…) y pensé ¡hagámoslo en internet!. Durante esa semana, la conversación sobre la serie cambiaba constantemente. Era emocionante verlo".

[2] Un juego de palabras entre Peak TV, que es como últimamente se llama en los medios especializados a esta era de tantísima producción de ficción, y fleek, que significa, estupendo o en el clavo o algo así en plan positivo.

Parece muy acertado que Lindelof vuelva a sacar el debate sobre el binge-watching al hablar de una producción como ‘The Leftovers’. Es un drama intenso y trágico que seguramente se beneficie de la emisión semana a semana, de poder asimilar lo visto, procesarlo, pensarlo y dejarnos llevar por lo que nos hace sentir. Personalmente tiene sentido porque cada capítulo de la serie, sobre todo en su segunda temporada, me ha dejado poso de días y soy consciente de que lo he disfrutado más por llegar en esas dosis.

Sin embargo, hay que ser conscientes de que cada uno se aproxima a la ficción a su manera, y que las costumbres para visionar y disfrutar de una serie pueden cambiar mucho de un espectador a otro. ¿Qué os parece la carta y la reflexión que plantea Lindelof?

En ¡Vaya Tele! | ‘The Leftovers’ se muestra (aún más) apocalíptica en el tráiler de la tercera y última temporada

Comentarios cerrados
Inicio