Internet y la televisión recortan distancias. Las cadenas son conscientes de que nuestros hábitos de consumo como telespectadores han cambiado y cada vez recurrimos más a la red para visionar programas a la carta, por comodidad y por cuestión de horarios (aunque la publicidad es casi más molesta). Y no sólo frente a la pantalla de la caja tonta: pasamos horas con la cabeza metida en nuestros smartphones y nuestras tablets.
Y ese es precisamente el target al que intentan convencer las plataformas digitales de televisión, ofreciendo la posibilidad de disfrutar de la televisión cuando no estamos frente al televisor. O, como en el caso de Magine TV, desde varios dispositivos a la vez. La pregunta del millón: ¿compensa pagar por algo así? Sí, si la calidad de los canales o el atractivo de sus contenidos ganan por goleada a toda esa proliferación de nuevas cadenas que han surgido con la TDT y que nos ofrecen lo que no encontrábamos en las generalistas (canales de cine, de documentales, infantiles). No, si voy a obtener casi lo mismo que encendiendo la tele. Y Magine, de momento en fase beta, navega entre esas dos aguas.
¿Qué nos ofrecen?
La principal motivación del usuario que decida suscribirse a Magine TV (de momento se puede solicitar una invitación a través de la web) será el poder disfrutar de la televisión everywhere, sólo con un dispositivo con conexión sin cortes. En su web aseguran que con un mínimo de 700 Kb puede verse sin problemas técnicos, pero recomiendan una conexión de 8 Mb para que la experiencia sea totalmente satisfactoria (doy fé, mis escasos 1,3 Mb de velocidad han complicado a veces el visionado en streaming). En todo caso, no hay que olvidar que está en fase de pruebas y eso lo condiciona todo.
Magine convierte la televisión en una app más que llevar en nuestro smartphone (de momento sólo para iOS aunque ya están trabajando en la aplicación para Android). Y por ende, permite liberarse de la esclavitud del aparato, anclado a un cable de antena. Se instala en el ordenador o en el dispositivo como un programa más; sólo requiere descargar un plugin para empezar a funcionar. Claro que falta por el tráfico de datos que consume si tiramos de conexión del móvil resulta rentable.
En cuanto a los contenidos, su oferta resulta tentadora si eres un gran fan de los documentales: Magine cuenta con los canales Historia, National Geographic, National Geographic Wild, Viajar y Odisea. Lo cierto es que el catálogo, dentro de ser bastante limitado, intenta llegar a todos los públicos, con oferta de canales infantiles (Nickelodeon y Panda), de cine (Canal Hollywood), de series (Paramount Comedy y Cosmopolitan), de "hogar" (Decasa y Canal Cocina) o de música (Sol). Pero es como si se quedaran a medio camino. Reconozcámoslo: Cosmo no tiene las mejores series del mundo (exceptuando 'Cougar Town') ni Canal Hollywood emite un peliculón tras otro. Creo que teniendo sólo 13 canales deberían haber sido aún más selectivos.
En cualquier caso, lo justo es concederles el beneficio de la duda, pues, según nos comentan vía e-mail, actualmente están "negociando con las empresas poseedoras de los derechos para aumentar la oferta de Magine con todo tipo de propuestas para todos los públicos". La invitación se ha extendido también a las generalistas ya que, según aseguran desde la nueva plataforma, "lejos de competir con ellas, diversos estudios demuestran que Magine puede suponer una nueva forma de acceder a sus contenidos". Si no puedes con ellos, únete.
Los puntos flojos
Una web es una carta de presentación, máxime si no sólo quieres hablar de tu empresa, sino venderla como parte del medio. La web de Magine no resulta especialmente práctica ni atractiva a la hora de navegar. Más bien, da algo de pereza cuando se trata de buscar contenidos. Para acceder a los programas a la carta en lugar de ayudarnos con un listado o clasificándolos de alguna manera, hay que realizar la búsqueda por días, como en una parrilla de programación al uso; enfrentarse a toda esa cantidad de información en bruto e ir pinchando en cada espacio, sin saber si podrás ver finalmente lo que quieres. Lo cual nos lleva al siguiente punto flojo.
La oferta a la carta varía según el canal. El cine, por ejemplo, sólo está disponible en las 24 horas siguientes a su emisión. Otros, como Paramount Comedy no ceden los derechos de todas sus emisiones. Como anécdota, diré que no he conseguido ver un sólo capítulo de 'Friends', ni en directo ni a la carta, pese a que desde Magine comentan que todos los contenidos se pueden ver en streaming y que en todo caso "quizá sea porque debido al respeto a los derechos de emisión no están disponibles en ese momento". Y había momentos como ese en los que era lo que más me apetecía ver. El contenido del resto de canales suele estar disponible entre dos y siete días (dependiendo del canal).
¿Cuánto cuesta?
He ahí el quid de la cuestión. El precio aún no se ha decidido y eso lo condiciona todo. Puede que no sea la mejor oferta del mundo pero que el precio del servicio sea asequible puede determinarlo todo. De momento, Magine es una aplicación libre y gratuita para el que lo quiera probar, hasta que se lance oficialmente. Se puede solicitar una invitación desde la web.
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