Hoy queríamos simplemente hacer un homenaje a 'Gran Reserva' y a partir de ella a toda la ficción española. Tenemos una gran serie, hace dos años estábamos estrenando a estas alturas y hoy queremos hacerlo como si hubiese sido un año más. Sabemos que el público está ahí, que nos está esperando, y queremos que todo el mundo sepa que nosotros también estamos aquí preparados.
Con estas palabras Teresa Fernández Valdés, productora de Bambú Producciones, dejó clara la postura de su empresa con respecto a la situación de las series nacionales de Televisión Española durante el preestreno de la tercera temporada de 'Gran Reserva' que tuvo lugar anoche en Madrid. A diferencia de otros preestrenos, el que vivimos el día de ayer en el cine Capitol no estuvo protagonizado por la fiesta y el glamour sino que se respiraba reivindicación.
A pesar de que el estreno natural de 'Gran Reserva' siempre ha sido el mes de marzo, la situación crítica de RTVE ha postpuesto de manera indefinida la emisión de los nuevos episodios, tanto de esta serie como del resto. Una situación que, de momento, no parece que vaya a mejorar hasta que se establezca un nuevo presidente en el Ente público.
Este estancamiento perjudica gravemente a la industria audiovisual y Bambú Producciones se posicionó anoche. Ellos ya han hecho los deberes, han producido las nuevas entregas de 'Gran Reserva' y las tienen listas para emisión, y encima es un material de una gran calidad, como pudimos comprobar. Más claras aún fueron las palabras de Luisa Martín, quien defendió el papel de la ficción nacional en la televisión pública así:
En este momento la ficción en España está en un frágil equilibrio, pero la ficción en España en estos momentos es la mejor, probablemente, que se haya hecho nunca. Y decir que esto no es sólo entretenimiento. Esto es una industria maravillosa que da de comer a muchísima gente. Que lo respeten y que lo ayuden como merece.
Tercera temporada: pagando las consecuencias del pasado
En el preestreno pudimos ver el primer episodio de la tercera temporada de la serie, el número 27, sin fecha de estreno prevista. En este capítulo, los Cortázar y los Reverte se ven obligados a pagar las cuentas por sus acciones pasadas. Estamos claramente ante un inicio de temporada en el que se recoge todo lo sembrado en el fin de la temporada anterior, mostrándonos cómo va a ser la vida de cada uno de aquí en adelante. A partir de aquí os cuento, a grandes rasgos y sin spoilers, cómo arranca la temporada.
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Vicente y Rosalía. El patriarca de los Cortázar tuvo que ver cómo le expulsaban de su propia casa tras la llegada de su ex mujer y de que los hijos se pusieran de parte de ella. Pero, ¿iba Vicente Cortázar a rendirse tan fácilmente? ¿se limitaría a retirarse y asumir su derrota? Estaba claro que no. Vicente vuelve dispuesto a reconquistar su trono Cortázar y no dudará en pelear contra Rosalía o cualquiera de sus hijos que le rete. Y lo hace como sólo él sabe. Y ella tampoco está dispuesta a perder de nuevo, ¿mantendrá el matriarcado?
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Miguel y Paula. El matrimonio del mayor de los Cortázar quedó hecho añicos tras la muerte de la hija que tenían en común. Pero eso no era el último vínculo que les unía, hay otro: el odio. Paula vuelve dispuesta a luchar contra Miguel intentando arrebatarle lo que más aprecia, el poder en las bodegas.
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Pablo y Sara. El accidente que dejó en silla de ruedas a Sara plantea una nueva situación para una pareja que estaba casi rota. Ahora Pablo, el buenazo, no es capaz de alejarse de ella y debe aguantar, por compasión, a una persona a quien ya no ama. ¿Aguantará así mucho tiempo? Al menos tiene la compañía de una nueva ayudante en la bodega.
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Emma y Gustavo. Las parejas no pasan por su mejor momento en la familia Cortázar y desde luego Emma y Gus no iban a ser la excepción. La muerte de Manu que pesa sobre las espaldas de ella es el secreto con el que él la maneja como quiere. El fanfarrón de Gustavo se ha hecho con el control de buena parte del accionariado y se perfila como el malo de la serie. Aunque al pobre el puesto le viene grande, le falta inteligencia.
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Daniel y Lucía Reverte. No sólo los Cortázar se enfrentan a las consecuencias de sus actos, también los Reverte deberán rendir cuentas ante su propio destino. Los remordimientos de Daniel por el accidente de coche en el que murió Lorena le pesan, y lo harán más aún cuando conozca a un ser allegado de esta. Por su parte, Lucía se enfrenta a la cárcel a la que la llevó su mala decisión de fiarse de Raúl, quien permanece fuera del mapa.
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Carlos. Y entre toda esta maraña de personajes, intrigas y efectos tenemos a Carlos, un nuevo personaje a quien da vida Unax Ugalde. Evidentemente, no os contaré quién es, pero parece que viene para quedarse y se irá haciendo un hueco poco a poco entre las familias, aunque de momento no veamos la ambición en sus ojos. Y no será el único personaje nuevo?
TVE debe despertar
En un momento tan difícil para la industria, actos como el de anoche son, cuanto menos, necesarios. Como os decía, no fue un preestreno al uso. Allí se subieron al escenario todos y cada uno de los actores de 'Gran Reserva' y entre las butacas vimos a los rostros de 'Gran Hotel' o a profesionales de otras productoras. Todos apoyando la causa, TVE debe despertar y darse cuenta de que no puede dar la espalda a sus series. No puede olvidarse ni de los buenos productos que tiene entre manos, ni de los espectadores que los esperan, ni tampoco de los trabajadores cuyos sueldos están en juego.
Y como demostró anoche el primer episodio de la tercera temporada de 'Gran Reserva', en los cajones de TVE hay guardada calidad de sobra.
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