La película de Sexo en Nueva York es un capítulo alargado

La película de Sexo en Nueva York es un capítulo alargado
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La película de Sexo en Nueva York ya está en las salas. Ayer fui a verla y después de dos horas y media de salí del cine con la sensación de que la película es como una capítulo de la serie alargadísimo. La película conserva de la serie ciertos momentos frescos, chispeantes, pero las tramas me parecieron aburridas y previsibles. Eso sí, hago constar que el final de la serie me pareció un fiasco y como la película parte de ese momento ya intuí yo que la cosa no me iba a gustar demasiado.

Obviamente, la tentación de seguir haciendo caja con la franquicia es inevitable y comprensible. Cualquiera habría intentado estirar el éxito, pero a qué precio. Los personajes masculinos están más desdibujados que nunca y la propia Carrie es una caricatura de sí misma. La película es una suma de los momentos clásicos de la serie y parece que para escribir el guión hayan usado una lista de los ingredientes imprescindibles: el desfile de moda, el desayuno en la cafetería, el sexo, desnudos, palabras malsonantes...,. Todo esto, que en la serie tenía su sentido, en la película se acumula sin orden ni concierto, construyendo un entorno vacío cuando en la televisión daba la sensación justamente contraria.

Peligro spoilers: Después del salto hay revelaciones sobre la trama de la película de Sexo en Nueva York. No sigas leyendo si tienes pensado ir a verla.

Hay ciertos momentos en la película absolutamente forzados y surrealistas. Por ejemplo: el beso entre Standford y Anthony, el organizador de la boda. Corregidme si me equivoco pero creo que estos dos personajes se odiaban en la serie, aunque de esto en la película no se dice ni media. Chris Noth está espantoso. Los supuestos momentos de tensión y de drama están penosamente exagerados. En general, me aburrí como una ostra, cosa que no me pasaba viendo la serie pero claro, no es lo mismo montar una comedia con episodios de veinte minutos que escribir un drama de dos horas y media e intentar, además, que sea mínimamente parecido a su precedente.

En fin, que en la película de Sexo en Nueva York hay muy poco de la serie y si se va al cine sin la expectativa generada por la serie mejor porque a mí me parece que se han quedado muy lejos de hacer algo ni siquiera similar. La película en sí es una comedia romántica con puntos excesivamente dramáticos, con un ritmo irregular y un guión con altibajos. Cuando las cosas no dan para más es mejor dejarlas como están.

En ¡Vaya Tele! | ¿Sexo en Nueva York tendrá más películas?

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