El plan de Alicia en 'The Good Wife', ¿ambición o chantaje?

El plan de Alicia en 'The Good Wife', ¿ambición o chantaje?
6 comentarios Facebook Twitter Flipboard E-mail

Con su sexta (¡sexta!) temporada, 'The Good Wife' ha entrado en su tercer y último acto. Mal que nos pese, el final de la serie está relativamente cerca. Después de seis años ha llegado el momento de olvidarse de audiencias, ratings, premios y demás factores que podrían haber influido en su renovación año a año. CBS ha demostrado que se basa en otros criterios para renovar a su niña bonita, y no va a ser ahora cuando opten por cargarse a la serie sin previo aviso. 'The Good Wife' terminará con un final anunciado con mucha antelación, y si atendemos a la teoría de la conspiración, es probable que este final llegue en su séptima temporada.

Las semillas para este posible final ya han sido plantadas. Alicia ha tardado tres episodios en admitir que el cargo de fiscal del distrito le viene como un guante, y su introducción en la carrera política abre todo un abanico de posibilidades para la serie. Ahora bien, ¿cuál es la verdadera motivación de Alicia para pasar finalmente por el aro? ¿La defensa de un sistema judicial sin corrupción? ¿La potenciación de una figura femenina (ese encuentro con Gloria Steinem) en la más alta política? ¿O entran en juego sus sentimientos personales y las ganas de repartir las cartas a su favor?

Alicia Eli

En cualquier caso, parece claro que esta va a ser la guía serializada fundamental de esta temporada, y quizá también de la siguiente (¿y última?). No lo hará en solitario, en paralelo también tenemos la imputación de Cary en el tráfico de drogas, involucrado sin quererlo en la espiral de destrucción de Lemond Bishop. Ha sido un gran acierto apartar parcialmente la atención de Alicia en estos primeros compases, centrándose en un personaje que siempre ha demostrado tener mucho más en su interior de lo que los King nos han querido enseñar. Sus expresiones en la cárcel, las miradas (y lo que no son miradas) con Kalinda... dicen mucho de un personaje que se comunica mejor con un gesto que con una frase.

No nos olvidamos de Diane Lockhart, ahora pasada al lado oscuro junto a otros seis jefes de departamento de Lockhart & Gardner. El afán de la serie por ningunear lo ocurrido en el bufete tras esta marcha ha sido una de las cosas que más me ha sorprendido. Es evidente que no hemos visto lo último de Louis Canning y David Lee en la serie, pero con un inicio tan frenético por dos frentes distintos, es justificable que se quieran guardar balas para más adelante. Al fin y al cabo, lo de Diane ha sido un "hitting the fan" en pequeñito, y sus consecuencias, sobre todo en los juzgados, van a ser muy disfrutables.

Estas tramas serializadas dejan poco espacio para el caso semanal; pocas veces hemos visto a 'The Good Wife' tan apartada de su parte procedimental, también responsable en buena parte de que se considere el mejor drama emitido en abierto (quizá también en cable, aunque los hay demasiado puristas), pero es de esperar que esta parte se recupere más adelante una vez que se estabilicen todos los frentes. Una temporada con mucho, muchísimo que contar y a la que no le está pesando nada la falta de uno de sus pilares en la trama sentimental. Y hablando del tema, ¿para cuándo un encuentro entre Finn Polmar y Alicia fuera del juzgado? Todos lo estamos deseando.

En ¡Vaya Tele! | 'The Good Wife', la serie que no tiene miedo de Internet

Comentarios cerrados
Inicio